Esta vez quiero tocar uno de esos temas en los que probablemente nunca jamás llegará a haber consenso total;
¿Son más eficientes los frenos de disco o los de zapatas de toda la vida?
Resulta cuando menos desconcertante el sentarse por la mañana delante de un ordenador para ver como la gente se enzarza en encarnizadas peleas en los foros discutiendo sobre tipos de frenos para bicicletas mientras que en la otra parte del planeta, Donald Trump sigue liándola parda en cada aparición pública que hace.
Como el ser humano tiene una necesidad innata de situarse a un extremo u otro del espectro independientemente de cual sea el tema de discusión, voy a intentar exponer de forma clara y concisa los beneficios e inconvenientes de cada uno de los sistemas.
Así, después de leer este artículo podremos, también nosotros, pelearnos a muerte en los foros.
(En caso de que tengas poco tiempo te recomiendo que saltes al video del final)
Ventajas de los frenos de disco:
- Gran potencia en la frenada.
- Más efectivos en presencia de barro o agua.
- No se ven afectados en caso de que la llanta se descentre.
- Ofrecen una gran durabilidad siempre que los cuides adecuadamente.
- No desgastan ni marcan la llanta (pista de frenado) ya que no la tocan.
- Al no rozar la llanta no la calientan y se evitan posibles reventones de la cámara por el exceso de calor en descensos muy largos y pronunciados.
- Las llantas específicas para frenos de disco suelen ser algo más reforzadas.
- A algunos nos gusta más la estética de una bici con frenos de disco.
Inconvenientes de los frenos de disco:
- Someten a los radios a una mayor presión durante las frenadas.
- Los frenos de disco suelen necesitar unas horquillas más gruesas ya que todo el estrés de la frenada se transmite a un solo brazo de la misma.
- Resulta algo más complicado el acoplar una parrilla o portabultos aunque ya existen modelos específicos para frenos de disco.
- No podremos sujetar la bicicleta con cualquier soporte que se enganche al eje trasero.
- Las pastillas de freno se pueden contaminar fácilmente si no se manejan con cuidado.
- Los rotores de los discos de freno son más pequeños que la llanta asi que se calientan más rápido y disipan peor el calor.
- En largos descensos, si el rotor de freno se calienta demasiado puede llegar a calentar los bujes lo que sería perjudicial para los rodamientos.
- El rotor de los frenos de disco es propenso a doblarse debido a un golpe o al mal manejo durante el transporte. Si es así seguramente habrá que reemplazarlo aunque también hay herramientas específicas para enderezarlos.
- Puede resultar bastante complicado el mantener en perfecto funcionamiento y sin ruidos los frenos de disco y a menudo necesitan ajustes puntuales.
Ventajas de los frenos de llanta:
- A veces lo más simple es lo mejor.
- Ajustados correctamente pueden frenar cualquier bicicleta.
- Baratos de reparar o reemplazar.
- Menor estrés para los radios.
- Menor estrés también para la horquilla delantera.
- Ninguna limitación a la hora de elegir una parrilla delantera o trasera.
- Puedes usar cualquier soporte para sujetar la bici que se enganche en el eje trasero.
- Revisando la separación de las zapatas con respecto a la llanta es muy sencillo el saber cuando se hace necesario el centrar las rueda.
- Ningún riesgo de sobrecalentar los bujes en descensos duros.
Inconvenientes de los frenos de llanta:
- Tienden a desgastar y dejar marcas en la pista de frenada de la llanta.
- En caso de descensos duros se puede sobrecalentar la llanta con el riesgo que ello implica para la cámara.
- No tan efectivos cuando hay barro o sobre mojado.
- La frenada no es tan potente como con los discos.
- Si te gustan los discos… las zapatas no quedan tan bien.
- Si tienes ruedas de carbono hay que usar zapatas de corcho especiales, no valen las de goma.
Como ves todo tiene sus pros y sus contras y todo depende de lo que más valores a la hora de coger la bicicleta; rendimiento, estética, comodidad, precio, sensaciones.
Para facilitar la elección he enfrentado ambos sistemas en función de 6 criterios.
1. PESO:
En este campo los frenos de llanta superan a los de disco ya que solamente requieren de zapatas, pinzas y los cables. Un sistema más simple y más ligero ya que no cuentan con las pinzas sobredimensionadas ni los rotores presentes en el otro sistema.
Frenos de disco: 0 – Frenos de llanta: 1
2. MANTENIMIENTO:
Al tener más piezas y más complejas, los frenos de disco suelen ser algo más problemáticos a la hora de tenerlos siempre a punto.
Sé que muchos de vosotros me diréis que nunca os han dado un solo problema pero suelen ser algo más complicados de regular.
Una vez aproveché una visita al taller de bicicletas para preguntarle al mecánico si era normal que los discos rozasen un poco en la pinza de freno y me sorprendió al decirme que era imposible que dejasen de rozar completamente y que cuando no escuchase ese rozamiento significaba que era hora de cambiar las pastillas.
Sinceramente, todavía no he entendido su explicación.
Si tus frenos de disco son hidráulicos, el tener que cambiar el líquido de freno es otro aspecto del que no te tendrías que preocupar si tienes simples frenos de llanta.
Si no soportas los ruidos, es posible que los frenos de disco te traigan más de un quebradero de cabeza.
¿Quieres un consejo? Si el disco de freno te roza la pinza haciendo algo de ruido, no toques nada. Primero saca la rueda y vuélvela a montar. Te aseguro que solo con eso van desaparecer muchos problemas.
Frenos de disco: 0 – Frenos de llanta: 2
3. POTENCIA DE FRENADO:
En este caso destaca la eficiencia de los frenos de disco, especialmente cuando rodamos en mojado.
Las zapatas pierden algo de agarre cuando la pista de frenado de la llanta está mojada.
Frenos de disco: 1 – Frenos de llanta: 2
4. SENSACIÓN DE LA FRENADA:
Como se suele decir, la potencia sin control no sirve de nada.
No es que con frenos de llanta no controles la frenada pero con los de disco la frenada es más gradual, se controla más donde está el límite hasta el cual puedes frenar sin perder tracción en las ruedas.
Este punto es una de las principales razones por la que los que practican descenso de montaña solamente usan frenos de disco.
Necesitan controlar mucho la fuerza que pueden aplicar en la maneta sin llegar a bloquear la rueda.
Frenos de disco: 2 – Frenos de llanta: 2
5. EN PRESENCIA DE BARRO Y AGUA:
En este área los frenos de disco salen claramente victoriosos. Este es uno de los motivos por los que los discos son tan populares en ciclismo de montaña y ciclo turismo.
Incluso una especialidad que parecía terreno exclusivo de los frenos cantilever como es el ciclocrós está adoptando rápidamente los discos, capaces de lidiar con las condiciones tan extremas que caracterizan a estas carreras.
Frenos de disco: 3 – Frenos de llanta: 2
6. PRECIO:
Los frenos de llanta llevan muchas décadas entre nosotros, son baratos, con menos componentes y mucho más fáciles de reparar que unos frenos de disco.
Esta es una clara victoria para las zapatas de toda la vida.
Frenos de disco: 3 – Frenos de llanta: 3
¿Tanto leer para al final tener un empate?
Pasemos al desempate…
Conclusión y valoración personal:
Valoro mucho la sensación de frenado que ofrecen los discos.
Siento que hay un mayor control sobre la bicicleta, una frenada mucho más gradual y suave.
En los descensos largos, con frenos de llanta, siento que a medida que avanzan los kms tengo que apretar cada vez más las manetas del freno para mantener la misma fuerza de frenado.
Da la sensación de que todo el peso de la bicicleta y del ciclista luchan contra las zapatas pero con los frenos de disco, siento como la frenada es más uniforme, como si fuese toda la bicicleta la que va frenando continuamente. Es complicado de describir pero es una sensación que me da mucha seguridad.
Además de eso, me encanta el ir bajando pendientes del 10% de desnivel frenando solamente con un dedo.
Nunca me ha parecido que los frenos de llanta fuesen insuficientes y creo que cumplen perfectamente con su propósito que no es otro que el de parar tu bicicleta pero una vez que pruebas los frenos de disco es una sensación extraña el volver atrás.
Otro punto a favor de los frenos de disco es que para mí embellecen mucho la bicicleta.
Las bicicletas de ciclocrós por ejemplo me gustan mucho más con los rotores de los frenos de disco que con los cantiléver que fueron los dominadores durante muchos años en esta disciplina.
Pero esto ya es una opinión muy personal y como dijo Groucho Marx:
“Estos son mis principios y si no le gustan… tengo otros”
Si lo que necesitas son datos:
Si no estás totalmente convencido y quieres pruebas empíricas te recomiendo que veas el vídeo que pongo a continuación.
Lo he encontrado en la web de Ciclismo a Fondo, una revista con mucha solera y años de tradición en España.
En una entrevista al ciclista colombiano Esteban Chaves, afirma que se aficionó al ciclismo de niño mientras leía y recortaba a los grandes del ciclismo que aparecían en esta revista que compraba su padre.
Totalmente recomendada.
En el vídeo, la marca MMR y el exciclista profesional Chechu Rubiera relizan varias pruebas para ver cual de los dos sistemas es más efectivo en diferentes condiciones.
Estas pruebas consistieron en:
- Descenso pronunciado del Angliru durante 6,3km para medir luego el calor de la horquilla y llanta, presión de neumático y demás factores.
- Frenada de emergencia midiendo el tiempo y distancia que se tarda en detener la bicicleta por completo ante cualquier imprevisto.
Os dejo con el vídeo a continuación.
- ¿Reniegas de alguno de los dos sistemas?
- ¿Crees que los frenos de disco terminarán por imponerse en todas las modalidades de ciclismo?
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